Hace mucho tiempo estuvimos hablando en este mismo blog muy brevemente de este tipo de patología. En esta ocasión vamos a profundizar un poco más, debido que con los pasos de años en nuestra clínica por nuestra propia experiencia es un tipo de lesión muy común y con demasiada frecuencia entre nuestros pacientes.

¿Qué es la ciática?

Empecemos por saber que es la ciática, una ciática no es más que el dolor de una raíz nerviosa de un tronco nervioso que se llama el nervio ciático, los síntomas que puede provocar son fundamentalmente dolor a lo largo de la pierna en diferentes zonas porque este nervio ciático inerva la musculatura y la sensibilidad de buena parte de la pierna. Por lo que una ciática te puede provocar incluso dolor en la planta del pie o en la punta de los dedos, aunque el sitio más frecuente es un dolor en la zona del glúteo o en la parte posterior de la pantorrilla.

Síntomas

El nervio ciático se origina en la columna vertebral lumbar y es el nervio más largo y grueso del cuerpo extendiéndose desde el raquis hacia las nalgas, por la parte posterior de las piernas, siguiendo por los muslos hasta las rodillas y finalmente hasta los dedos de los pies. Entendiendo que el nervio afectado tiene una amplia expansión, es compresible que los síntomas se desarrollen en esas zonas, siendo los signos más comunes:

  • Dolor que se irradia desde la parte inferior de la espalda, hacia las nalgas y hasta la pierna; a veces incluso hasta los dedos de los pies. Por lo general, solo una pierna se ve afectada.
  • Dolor lumbar y de cadera que empeora con el esfuerzo, por ejemplo, al levantar un objeto pesado, a veces también al toser, estornudar o hacer fuerza.
  • Dolor lumbar irradiado acompañado de alteraciones sensoriales como hormigueo, ardor o entumecimiento o signos de parálisis en grupos musculares individuales de la pierna.

Causas

La causa principal es la hernia discal lumbar. Los discos intervertebrales son placas de amortiguación cartilaginosas que se encuentran entre las vértebras de la columna. Los mismos, cuando se someten a cargas pesadas, pueden «deformarse», sobresaliendo más allá de los cuerpos óseos vertebrales y presionando así a los nervios adyacentes. Esto puede ocurrir debido a un desgaste o deshidratación severa del disco (por envejecimiento o causas metabólicas), desbalance muscular (debido a cargas excesivas sobre la zona lumbar o sobre entrenamiento) o un accidente puede hacer que ese disco reviente de golpe, el disco intervertebral lumbar puede romperse en un punto y el núcleo gelatinoso puede escapar parcialmente y ejercer presión sobre el nervio ciático.

Puede haber otros dolores ciáticos provocados, por ejemplo, por un espasmo del músculo piramidal, es un músculo que tenemos en el glúteo (en el fondo de la nalga), el nervio ciático que ya ha salido de la columna lumbar puede verse estrangulado por un espasmo de ese músculo, esto sería en caso de una ciática menos aguda o menos intensa.

Tratamiento

Desde el punto de vista fisioterapeuta y de la osteopatía, el principal tratamiento que se le realizara es la alineación de la columna, el osteópata generalmente actuará de la siguiente manera: en una primera evaluación se realizará un examen exhaustivo de la columna vertebral y se hará una historia detallada del problema. Para ello hará un estudio del caso en profundidad y teniendo en cuenta estudios anteriores ya realizados, ya sean radiografías, análisis, etc. Posteriormente el paciente se someterá a un completo examen neurológico, ortopédico, postural y físico.

Con todo esto el osteópata diagnosticará su problema y de acuerdo con los problemas encontrados determinará el tratamiento más conveniente. Entre otros, tratará el ajuste de las vértebras que se vean afectadas. Este ajuste de las vértebras es una técnica indolora que se utiliza tanto para tratar el problema de la ciática como otras enfermedades originadas en la columna vertebral. El tratamiento del osteópata elimina la presión sobre el nervio ciático y reposiciona correctamente las vértebras de las lumbares o el sacro resolviendo en el mejor de los casos el problema y suprimiendo el dolor. A diferencia de otros procedimientos, en los que se aborda el tratamiento de la ciática mediante la medicina convencional, a través de las terapias manuales podemos iniciar el proceso de reparación desde la primera visita, sin enmascararlo con anestésicos vía intramuscular (corticoides, Urbason…) y, por supuesto, ahorrar en tiempo y salud, abordando el problema desde su origen.

En nuestra clínica de fisioterapia y osteopatía situada entre Fuengirola y Mijas (Málaga) tenemos una extensa experiencia con cientos de pacientes con este tipo de lesión, obteniendo resultados muy buenos en pocas sesiones, por supuesto cada paciente se le tendrá que realizar tratamientos adaptados y por lo cual en cada caso el tiempo de recuperación será distinto, obtenga más información consultándonos por nuestras vías de comunicación habituales siendo la vía telefónica la más efectiva y rápida.